La
cuestión fundamental no estriba en lo que son las cosas, sino en
los movimientos cambiantes de las mismas, lo fundamental es hacia
donde se mueven. Lo que es, lo es ahora, ya que en un instante todo cambia y se transforma en algo totalmente diferente.
En
la fotografía podemos ver como el polen de la flor, ha quedado
encerrado dentro del hielo, ¿podrá finalmente germinar y
transformarse en nueva vida?
No
dependerá ni del polen, ni del hielo, sino de los movimientos
cambiantes de las cosas, de hecho instantes después de obtener esta
fotografía, el tiempo cambió bruscamente en Salardú y salió un sol
resplandeciente, la temperatura subió a mas de 12 grados
centígrados, ¿qué sucederá?, cualquier cosa, dependerá de los
próximos movimientos.
Para llegar a conocerte, la cuestión fundamental no está en conocer lo que tu eres,
o creas ser, sino en observar hacia a donde te mueves. De tus movimientos
surgirán cambios y de estos surgirán realidades, obras y es en nuestras obras donde se nos conoce.
Lo que tu o los demás creáis de ti, son tan solo opiniones, pero las obras son hechos, son reales. Es precisamente de nuestras obras donde el maestro Jesús nos enseña: “Por sus frutos los conoceréis” Mt 7.16.
Lo que tu o los demás creáis de ti, son tan solo opiniones, pero las obras son hechos, son reales. Es precisamente de nuestras obras donde el maestro Jesús nos enseña: “Por sus frutos los conoceréis” Mt 7.16.
Solo
observando nuestros movimientos cambiantes con las cosas, con las
personas y con las situaciones, podremos llegar a descubrir lo que
realmente somos, observando, solo observando.
Un
abrazo.
R